El campo y la inseguridad los pendientes de AMLO, señalan empresarios invitados al Segundo Informe de Gobierno
Por Omar Aguilar
Sin la presencia de gobernadores, ni líderes de los partidos de oposición, solo empresarios e integrantes del gabinete y del partido Morena, fueron los testigos presenciales del Segundo Informe del presidente Andrés Manuel López Obrador.
A diferencia de otros informes y debido a las medidas sanitarias, solo estuvieron en el patio central de Palacio Nacional 80 invitados casi todos allegados al movimiento del presidente de la República.
Todos arribaron por la calle de Corregidora para entrar por el número 8, donde dos personas del staff de la presidencia nos recibieron para estar en el informe enmarcado en una pandemia.
Por respeto y apoyo, todas las decoraciones expresadas a los medios fueron en apoyo a las acciones de gobierno del jefe del Ejecutivo Federal.
Sin embargo, los empresarios fueron los únicos que cuestionaron y criticaron varias cuestiones. Bosco de la Vega, presidente del Consejo Nacional Agropecuario denunció que el sector a su cargo es el más desprotegido y el más afectado.
Francisco Cervantes de la Concamin señaló que pese a que tiene voluntad de trabajar con el Gobierno Federal han sido muy afectados y apenas se empieza a mover con los planes de infraestructura que se preparan, no obstante indicó qué hay varios pendientes como la crisis económica provocada por la pandemia y la inseguridad que no ha sido solucionada y que afecta a todo el país.
En esto coincidió Ignacio Mier, coordinador de los diputados federales de Morena. Reconoció que es pendiente del gobierno y bien podría resolverse -dijo- en el siguiente año.
También entrevistado a la salida de Palacio Nacional, el secretario de Salud, Jorge Alcocer mencionó que la pandemia está controlada y que las declaraciones del director de la OMS no están apegadas a la realidad de México, en virtud de que el Gobierno de México trabaja adecuadamente
La jefa de Gobierno de la capital del país, Claudia Sheinbaum Pardo, externó su desacuerdo con la declaración que la Organización Mundial de la Salud (OMS) hizo respecto a su preocupación por el estatus que provocó que se duplicara el número de casos y fallecidos entre mediados y finales de noviembre en México.