México enfrenta un aumento en la migración centroamericana hacia Estados Unidos
Redacción
México.- En una conferencia de prensa celebrada este viernes, la Canciller de México, Alicia Bárcena, anunció que se espera que alrededor de 140 mil inmigrantes procedentes de Centroamérica crucen México en su camino hacia Estados Unidos este año. Esta cifra supera la capacidad de ambos países y presenta desafíos significativos para la región.
Durante la conferencia, la secretaria de Relaciones Exteriores destacó la importancia de la migración en las discusiones de la 78ª Asamblea General de las Naciones Unidas, donde se han abordado temas cruciales relacionados con la inmigración.
Bárcena compartió datos alarmantes sobre la situación actual, revelando que actualmente unos 3 mil emigrantes cruzan diariamente el peligroso paso del Darién, que se encuentra entre Colombia y Panamá. Estos migrantes continúan su viaje hacia el norte, y a lo largo del camino se unen personas de otros países centroamericanos. Como resultado, aproximadamente 6 mil personas se presentan a diario en la frontera sur de México, principalmente en la ciudad de Tapachula.
La canciller también proporcionó información sobre los países de origen de la mayoría de los emigrantes según los registros de México, que incluyen a Venezuela, Colombia, Ecuador, Haití, Guatemala, Honduras y El Salvador. Destacó que solo tres de estos países (Guatemala, Honduras y El Salvador) tienen un mecanismo de devolución de emigrantes, lo que plantea desafíos adicionales en el manejo de la migración.
Ante esta situación, Bárcena expresó la necesidad de abordar las causas profundas de la migración, como la violencia, la pobreza y la falta de oportunidades laborales. Hizo un llamado a considerar la cuestión migratoria desde una perspectiva regional que involucre a todos los países de paso y de origen, subrayando la importancia de una colaboración más estrecha entre naciones.
En el caso de Venezuela, la canciller mencionó que México se ha propuesto como mediador entre Caracas y Estados Unidos y está trabajando para impulsar la celebración de elecciones en Venezuela. Esto, a su vez, podría contribuir a levantar las sanciones y, en última instancia, frenar el éxodo de venezolanos hacia otros países.
La situación migratoria en la región sigue siendo un desafío complejo que requiere una cooperación regional y soluciones a largo plazo para abordar las causas fundamentales de la migración y garantizar un enfoque humanitario en el manejo de este fenómeno.