Descubren posible sitio arqueológico de concheros más extenso de Sinaloa en Isla Macapule
Un importante descubrimiento arqueológico ha sido registrado en la Isla Macapule, ubicada en el municipio de Guasave, Sinaloa. Se trata de un sitio de concheros que podría ser el más extenso del estado, con grandes acumulaciones de conchas distribuidas en ocho montículos que alcanzan entre 8 y 12 metros de altura y 30 metros de circunferencia en su base. Este hallazgo es significativo por su excelente estado de conservación, lo que podría ofrecer nuevas perspectivas sobre las interacciones culturales prehispánicas en esta región.
El sitio arqueológico fue registrado por el Proyecto Arqueológico Guasave (PAG), dirigido por José Rodrigo Vivero Miranda, quien destacó que la ubicación de este sitio, en la frontera entre las áreas culturales de Aridoamérica y Mesoamérica, lo convierte en un lugar clave para estudiar cómo las antiguas sociedades integraron elementos de ambas regiones y generaron su propia identidad cultural. «El territorio en el que hoy se ubica Guasave tomó prestados elementos de una y otra, y generó su propia identidad; una situación que hoy podríamos comparar con ciudades fronterizas, como Tijuana o Nogales», explicó Vivero Miranda.
En un recorrido de aproximadamente 30 kilómetros entre los poblados de Chorohui y La Pitahaya, el PAG registró 15 sitios, de los cuales 12 han sido afectados por la agricultura intensiva. Sin embargo, en Isla Macapule, a 10 kilómetros de la costa, se hallaron dos sitios que cubren 6 y 3 hectáreas respectivamente, donde se han identificado restos de cerámica, lítica, carbón y grandes acumulaciones de conchas.
El arqueólogo también mencionó que la excavación de los montículos de concha tendrá que esperar a la firma de un convenio entre el Centro INAH Sinaloa y la Universidad de Oklahoma. Este convenio podría abrir la puerta a estudios más profundos que podrían revelar contextos similares a los descubiertos por el arqueólogo estadounidense Gordon F. Ekholm en 1938, en el sitio conocido como «El Ombligo» en Chorohui, donde se recuperaron casi 190 entierros, algunos de ellos con deformación craneal tabular erecta.
El descubrimiento en Isla Macapule no solo representa un avance en la comprensión de las formas de subsistencia prehispánicas, sino que también podría ofrecer nuevas perspectivas sobre la interacción comercial y cultural entre los habitantes de la costa y los valles de la región, según destacó Vivero Miranda. Con la colaboración del Centro INAH Sinaloa, dirigido por Servando Rojo Quintero, se buscará obtener la declaratoria de Zona de Monumentos Arqueológicos para garantizar la protección y estudio de este valioso sitio.